RETOS
#RETOCONLIMON
Retrato, encuentro virtual y comunidad gráfica.
Este experimento gráfico se desarrolla con el objetivo de generar vínculos entre personas que no se conocen a través del retrato como herramienta de encuentro. La dinámica consiste en fotografiar individualmente a los participantes de diferentes grupos y reunirlos en un canal común de Telegram.
Cada día, una persona se presenta al grupo compartiendo su historia, imagen o intereses, y el resto realiza un retrato basado en esa presentación virtual. Este intercambio permite explorar cómo la mirada se transforma en dibujo incluso sin contacto físico, generando una red afectiva y visual en torno al rostro y la identidad.
El reto culmina con un encuentro presencial y una exposición colectiva “Ratos” en la que cada participante se representa por los retratos realizados por sus compañeros. La experiencia activa el retrato como dispositivo social, fomenta la empatía entre desconocidos y propone una lectura contemporánea del dibujo como práctica relacional.
RETRATOS SIN IDIOMA
Taller de dibujo con niños de China
Este “Reto” se desarrolla con un grupo infantil de Beijing, en un contexto en el que la barrera del idioma impide la comunicación verbal directa. El dibujo se convierte en el único lenguaje común posible.
A través de sesiones de retrato del natural, los niños se dibujan unos a otros en un entorno cuidado y lúdico que fomenta la observación, la empatía y la expresión personal. La experiencia revela cómo el acto de mirar y representar al otro puede generar vínculos incluso sin palabras, convirtiéndose en una forma espontánea de comunicación y reconocimiento.
El proceso culmina en una exposición colectiva de los dibujos realizados. Este taller subraya el poder del dibujo como herramienta universal para conectar personas y crear espacios compartidos de atención y juego.
RETRAZOS
Taller de dibujo a línea e intercambio visual
Este “Reto” se concibe como una experiencia de dibujo y encuentro entre personas que no se conocen previamente. A partir de una sesión inicial de retratos fotográficos entre los asistentes, se genera un banco de imágenes personales que sirve como base para un ejercicio de dibujo a línea con tinta.
Cada participante dibuja a los demás a partir de esas imágenes, en un proceso que conjuga observación, interpretación y memoria. Durante el proceso surgen conversaciones espontáneas en torno a los rostros, las expresiones y las historias detrás de cada imagen, generando un espacio de diálogo íntimo y colectivo a través del dibujo.
El taller propicia no solo una práctica técnica, sino también un ejercicio de reconocimiento mutuo y conexión entre desconocidos, utilizando el retrato como medio de acercamiento y reflexión sobre la identidad visual.